Establecer objetivos
Conocer la meta nos hace más fácil el recorrido. El éxito del marketing de contenidos reside en que va más allá de la venta; general un vínculo con el usuario y ayuda a trasmitir los valores y la personalidad de marca que nos distingue de la competencia.
Conocimiento del público objetivo
Conocer a nuestro público objetivo es esencial para una buena comunicación. Es muy importante hacer un buen análisis de nuestro mercado, una técnica muy útil para ello es generar varios buyer persona que representen a las distintas tipologías de clientes a los que nos dirigimos, segmentándolos por: edad, gustos, necesidades, motivación de compra, medio de compra (física, móvil, desktop…) o cualquier otro aspecto que sea interesante para nuestra empresa.
A través de este análisis previo, sabremos cómo dirigirnos a ellos, a través de que medios y qué lenguaje utilizar. No es lo mismo dirigirse a un joven vía Instagram que a un adulto a través de Facebook; aunque pueda parecer una tontería, hacernos entender nos acerca más a nuestro público objetivo.
Diseño del plan de contenidos
El plan de contenidos dependerá mucho del presupuesto con el que contemos. Esto no significa que tu plan de contenidos sea peor por tener un bajo presupuesto, sino que se adaptará a él manteniendo la misma calidad en los contenidos.
Normalmente, un blog en la web o una newsletter (campaña de emailing), serán más que suficiente para crear un plan sólido de contenidos que nos ayuden a atraer más leads. Pero, actualmente la gran competencia entre empresas nos empuja a dar un paso más allá para no quedarnos atrás y beneficiarnos de las múltiples posibilidades que nos brinda la red: las campañas con influencers y los podcasts son dos de las opciones más utilizadas por las marcas actualmente.
Promoción de contenidos
De nada sirve tener un gran plan de contenidos si no somos capaces de hacerlo llegar al usuario. Si no conseguimos que nuestros potenciales clientes vean, lean o escuchen el contenido que hemos generado para ellos, el tiempo y esfuerzo dedicados habrán sido en vano.
Una de las herramientas más efectivas hoy en día para distribuir nuestro contenido son los servicios de correo electrónico o emailing, pero para ello es imprescindible contar con una amplia base de datos.
Gestión de suscriptores, maquetación, envíos masivos o análisis de rendimiento son algunas de las tareas que debemos desempeñar si queremos que nuestra difusión de contenidos sea exitosa.
Dentro del plan de contenidos, el calendario es una parte importante, ya que nos ayuda a organizar los contenidos, asegurar una frecuencia de comunicación y mantener una alta calidad del contenido.
Esto, unido a las campañas pagadas, creatividades en redes sociales, el SEO y el resto de acciones, hará que el plan de marketing cobre forma y nos llevará a la consecución de los objetivos marcados.